Utilizamos apósitos avanzados que mantienen la herida en el nivel justo de humedad, lo que acelera el cierre y reduce el dolor. Es una forma moderna y menos agresiva de sanar, pensada para mejorar tu calidad de vida desde el primer día.
Cuando tienes una herida crónica o complicada, muchas veces ya pasaste por semanas o meses de curaciones dolorosas, gasas que se pegan a la piel, enrojecimiento que nunca desaparece y heridas que se vuelven a abrir una y otra vez. Todo eso no solo desgasta físicamente, también te roba tranquilidad y esperanza.
En Kura+ utilizamos la terapia húmeda porque entendemos que una herida no es solo una lesión: es una experiencia que afecta tu calidad de vida y la de tu familia. Nuestro enfoque busca sanar de forma más efectiva, con menos dolor y con mayor respeto por tu cuerpo.
¿Qué es la terapia húmeda?
La terapia húmeda consiste en mantener la herida en un ambiente controlado de humedad que favorece la regeneración del tejido. Contrario a lo que se pensaba en el pasado (donde se dejaba “secar” la herida al aire o con gasas absorbentes), hoy sabemos que las células de la piel necesitan humedad para multiplicarse, desplazarse y cerrar la herida de forma ordenada y rápida.
Este tipo de terapia se basa en décadas de evidencia clínica y se considera el estándar de oro en el manejo moderno de heridas.
¿Por qué usamos la terapia húmeda?
Porque ofrece beneficios reales, tangibles, y sobre todo, humanos:
Disminuye significativamente el dolor: los apósitos modernos no se adhieren al tejido nuevo, lo que evita ese sufrimiento innecesario en cada cambio de curación.
Acelera el cierre de la herida: la humedad adecuada permite que las células encargadas de regenerar la piel trabajen mejor y más rápido.
Disminuye el riesgo de infección: al mantener un ambiente sellado, se reduce la exposición a bacterias del exterior.
Evita la formación de costras innecesarias que retrasan el proceso y dañan el tejido sano.
Mejora la calidad de la cicatrización: al proteger la zona y permitir que cierre sin traumas repetidos, el resultado final es más funcional y estético.
¿Qué tipo de heridas se tratan con terapia húmeda?
En Kura+, utilizamos la terapia húmeda en una gran variedad de casos, especialmente en aquellos donde:
La herida no ha cerrado después de varios días o semanas.
Se ha intentado otro tratamiento y no ha habido mejoría.
Existe tejido expuesto que debe protegerse (como músculo o hueso).
Hay tejido inflamado, con dolor o enrojecimiento constante.
El paciente requiere un tratamiento menos agresivo, por su estado general o sensibilidad.
Algunos ejemplos comunes de heridas que pueden beneficiarse de esta terapia:
Úlceras por presión (también llamadas escaras)
Heridas quirúrgicas que no cerraron bien
Heridas traumáticas con pérdida de piel
Lesiones en personas con mala circulación o enfermedades crónicas
Áreas con injertos o colgajos quirúrgicos en proceso de integración
Heridas infectadas que ya han sido controladas, para continuar su cierre
¿Cómo funciona en Kura+?
Desde la primera valoración, nuestro equipo clínico analiza el estado de tu herida, tu historial médico, tu movilidad y tu entorno familiar. A partir de eso, diseñamos un plan de tratamiento personalizado que incluye el tipo de apósito ideal, la frecuencia de cambio, el seguimiento médico y el acompañamiento familiar necesario.
Trabajamos en clínica o directamente en tu casa, para adaptarnos a tus necesidades. Te explicamos cada paso y respondemos todas tus dudas.
Nuestro objetivo es que vuelvas a vivir sin dolor, sin miedo y sin heridas abiertas.
“No se trata solo de cerrar una herida, se trata de devolverte calidad de vida. Y la terapia húmeda lo hace posible.” — Equipo Kura+